Jorge Francisco Ferro es autor de varios libros centrados en el estudio de la Masonería y de la Tradición Iniciática de Occidente. Tras leer una larga e interesante entrevista que le realizaron en una web mexicana donde abordaba diversos tópicos vinculados a la Orden Masónica, el Martinismo y los Templarios, decidí entrar en contacto con él a fin de recoger su valioso testimonio sobre algunos temas de interés para los usuarios de esta página.
Agradezco de corazón a Jorge Francisco Ferro por su amabilidad y por responder a todas mis preguntas.
Phileas: ¿Cómo es un día en la vida de Jorge Francisco Ferro? ¿Qué actividades tiene incorporadas a su vida cotidiana?
Jorge Francisco Ferro: Principalmente, leer, investigar y redactar artículos, ponencias, etc. Obviamente, los libros requieren mucho más trabajo. Por lo demás, trato de practicar la moderación, la “sofrosine” de los griegos, en los restantes aspectos de la vida.
PdM: ¿Qué escuelas marcaron su camino?
JFF: Las doctrinas del Esoterismo Tradicional, alejado del Ocultismo decimonónico, de las mancias, del espiritismo, la goecia, la teosofía, etc. etc.
PdM: ¿Cómo llegó a la Masonería?
JFF: Por el convencimiento de que es la última orden iniciática auténtica de Occidente, a pesar de todas las Obediencias y escuelas en que está dividida, con una filiación histórica comprobable. De hecho, todas las neo-órdenes iniciáticas de Occidente tratan de obtener, como base, alguna filiación masónica por dudosa que esta pueda ser …
PdM: ¿Qué autores considera como referentes y le han influido positivamente en su desarrollo?
JFF: Principalmente, toda la obra de René Guénon. También Denys Roman, Jean Robin, Jean Tourniac, Paul Naudon, Jean Reyor y otros representantes de la escuela del tradicionalismo francés.
PdM: ¿Cómo le explicaría a un profano qué es la Masonería?
JFF: Básicamente, le diría que, en sus diversas expresiones, es una escuela de vida, algo que se ha perdido en la actualidad. Nadie se ocupa seriamente de formar el carácter de los individuos, de perfeccionar sus aspectos rústicos y convertirlos piedras aptas para insertarse armónicamente en el edificio de la sociedad.
PdM: ¿Es espiritual la Masonería?
JFF: Eso depende de la Obediencia o escuela doctrinaria a la cual nos refiramos … Hay de todo en la viña del Señor … Desde el deísmo de las logias inglesas, el laicismo del Gran Oriente de Francia, el templarismo masónico escocés, el liberalismo político de la grandes logias de Latinoamérica, etc. etc. la espiritualidad constructiva y edificante está o no está según las orientaciones y objetivos de cada Obediencia Masónica particular. No existe “la” Masonería sino “las” Masonerías y es imposible que haya una única orientación mundial de la misma como, por ejemplo, ocurre con la Iglesia Católica romana.
PdM: ¿Qué es para usted la Iniciación?
JFF: Es un difícil y arduo sendero de vida que, por medio de la transmisión de una influencia espiritual superior, tiende primeramente a perfeccionar el estado humano (Misterios Menores) y posteriormente a superar el estado individual humano (Misterios Mayores).
PdM: ¿Existe la contra-iniciación?
JFF: Sí, es la tendencia katabática de un espiritualidad inversa. Es el reflejo invertido e ilusorio del espejo…
PdM: ¿Qué son los Superiores Incógnitos y qué vinculación tienen con la Masonería?
JFF: El concepto de “Superior Incógnito” designa dos cosas:
1) es el nombre de un Grado iniciático que aparece en diversas Ordenes y Fraternidades.
2) es una de las designaciones que alude a la Jerarquía Iniciática del mundo. Por ejemplo, en diversas tradiciones reciben diferentes nombres: el Rey del Mundo, Melki-Tsedek, la ciudad de Salem, Agartha, Chang Shamballah, el Paraíso Terrenal, la Montaña de los Profetas de Ana Catalina Emmerich, etc. etc. Se trata de la jerarquía espiritual esotérica del mundo referida en todas las tradiciones como secreta y oculta en los finales del actual ciclo de la humanidad.
Históricamente, la Masonería occidental poseía un lazo directo, a través de los Templarios, con la ciudad de Salem o el reino del Preste Juan, según diferentes nomenclaturas, que fue cortado en el siglo XIV. Si bien dicho lazo efectivo y conciente se diluyó gradualmente siempre queda un contacto aunque no conciente ni efectivo. Sin embargo, el Centro Espiritual Supremo puede influir a voluntad sobre la Masonería, en todo o en parte, cuando lo considera necesario. Restablecer el lazo efectivo de alguna Obediencia Masónica con este Centro Supremo debería ser la principal tarea de quienes son concientes del problema.
PdM: ¿La Masonería contemporánea se ha corrompido?
JFF: En muchos países es así. En términos generales, el proceso es de decadencia principalmente por la ignorancia de sus miembros y la desviación de objetivos sobre todo hacia la política y el poder. Se han bajado mucho los standards de admisión.
PdM: ¿El Martinismo de la actualidad es fiel a Saint-Martin?
JFF: Desde sus orígenes, a fines del siglo XIX, el llamado “Martinismo” trató de relacionarse “idealmente” con Louis Claude de Saint-Martin y también con Martines de Pascually, su primer Maestro. Robert Ambelain proporcionó bastantes datos sobre esto.
El error básico del “Martinismo” es tratar de unir la Via Operativa de Martines con la Vía Cardíaca de Saint-Martin lo cual es imposible siendo masónica la primera y la segunda no. Además, son incompatibles por su propia naturaleza iniciática. La Vía Cardíaca de Saint-Martin proviene de la “Societé des Philosophes Inconnus” la cual, a su vez, deriva de los Hermanos de Oriente protegidos por el emperador Alexis I Comneno de Bizancio. Todo el simbolismo “martinista” es claramente NO masónico y alude al hermetismo, a la alquimia, a la ciencia, a la caballería, etc. pero NO al arte y ciencia de la construcción.
PdM: ¿Existe algún linaje martinista puro?
JFF: En realidad, lo que existe es un linaje de los Superiores Incógnitos en el sentido de un Grado iniciático. La rama francesa de ese linaje fue destruida en Francia por la Revolución Francesa, en el siglo XVIII, que persiguió a la nobleza de donde se reclutaban sus miembros. Saint-Martin confirió esta filiación, en el siglo XVIII, a varios príncipes y nobles rusos que la conservaron viva en Moscú, San Petersburgo y Kiev hasta la Revolución Comunista de 1717 que también la persiguió y destruyó en el siglo XX. Los exiliados rusos y ucranianos, tales como la familia Chumitsky, Nicolás Rogalev y Seguei Veshtñakov, la trajeron nuevamente a Occidente, particularmente a Sudamérica y Francia.
PdM: ¿Qué es la Orden Real de Heredom de Kilwinning?
JFF: La Orden Real es una orden de caballería cristiana sobre una base masónica proveniente de la Masonería Operativa antigua, anterior a 1717, por lo tanto, difiere, en muchos aspectos, con la Masonería Especulativa moderna. La Orden Real califica para acceder a otras Ordenes y Fraternidades interiores.
PdM: ¿Qué opinión le merece el trabajo de Fermín Vale Amesti y los conceptos de una Masoneria primigenia vinculada a la figura de Henoch?
JFF: Es una perspectiva muy interesante que vincula, ritual y simbólicamente, a la Iniciación de los Constructores con la acción de elementos supra-humanos en la Historia. El otro eslabón, más cercano a nosotros, lo constituye el Noaquismo que, en ciertas épocas, se lo tomaba como un sinónimo directo de Masonería.
PdM: ¿Considera que vivimos una Nueva Era, que estamos inmersos en una Nueva Edad Media, una época oscura (Kali-yuga) o qué? ¿Cómo considera este momento histórico?
JFF: No, de ninguna manera. No estamos en una Nueva Era sino que estamos en los finales de una Edad Oscura que no ha acabado y cuyos aspectos más temibles todavía no han aparecido. La señal del paso de una Era a otra son las catástrofes cósmicas que los acompañan. Siempre hay gente que confunde los dolores de la agonía con los dolores del parto…
PdM: ¿Cómo ve el panorama iniciático en Iberoamérica en estos momentos?
JFF: Lo veo confuso como en el resto del mundo. Sin embargo, siempre existen posibilidades ciertas de restauración esotérica tradicional. Esta restauración está ligada, justamente, al agotamiento del actual ciclo de la Humanidad, a la peculiar situación geográfica y climática de Sudamérica y no tanto por alguna especial cualidad de los hombres que habitan esta parte del mundo. Para una restauración tradicional no es suficiente la actividad humana sino que es necesaria la intervención de un elemento supra-humano en la Historia. O sea que deben manifestarse conjuntamente el Avatar Kalki, la Segunda Venida de Cristo, el Iman Dormido, el Buda Maitreya, etc. que, en definitiva, son una misma y única Presencia.
PdM: ¿Internet ha ayudado a la difusion clara de la filosofía iniciática o –por el contrario- ha contribuido a la confusión, los enfrentamientos y las difamaciones entre las diferentes corrientes?
JFF: Internet ha contribuido a la desunión, al conflicto, al agravio y a la confusión doctrinaria entre las diferentes corrientes que – contrariando todas las enseñanzas tradicionales acerca del secreto, la prudencia y el autocontrol – se han lanzado a las más diversas aventuras monetarias, a los más peligrosos liderazgos psicopatológicos, a los delirios de pseudoiluminados y las más diversas desviaciones posibles.
PdM: ¿Qué planes tiene para el futuro próximo?
JFF: Terminar dos libros inconclusos antes que nada. Luego, veré qué otras tareas concomitantes puedo encarar que, como dice el refrán, me proporcionen “provecho y saber”